He estado algo activa últimamente. Estan sucediendo tantas cosas a la vez, tengo un torbellino de sucesos y creo que las decisiones que tomeb en estos días repercutirán en la vida de mi familia, como un parte aguas.
Por un lado añoro el arte de lo que viene siendo mi trabajo como profesionista y el reto de cumplir las metas asignadas, lograr un buen modelo, un buen cálculo de volumen y documentar los procesos que llevaron a la obtención de resultados presentados. Quisiera realizar este trabajo sin miedo a perderlo. El miedo me entorpece.
Por otro lado tengo este no se qué que quiere emprender, innovar, vender, hacer dinero con otras actividades que también me gusten. Me encanta la creatividad que tengo escondida desde hace unos 10 años, sé que ahí sigue oculta en la banalidad de mis problemas. Revisando mis fotos antiguas, recordé lo creativa que era cuando era más joven. La última vez que me sentí creativa con algo que no tuviera que ver con mi carrera profesional fue hace unos 12 años.
Debo confesar que hay pequeñas chispas de creatividad en mí que podrían jalar al resto de la creatividad oculta.
Hay tantas cosas que quisiera hacer y no se con cual empezar, ya saben lo que dicen, no hay peor proyecto que el que no se empieza. Me estoy tardando. Bueno, lo primero que haré es escribir mis planes que en mi mente pueden desaparecer. Siempre escriban sus planes, hay mayor probabilidad de cumplir si lo escribes que si solo lo piensas.
